Antes que nada tengo que decir que me encuentro muy feliz por el resultado obtenido el día de ayer por la selección, que se logra algo histórico (en 80 años no se la había ganado a Francia), es también la primera victoria ante un rival de jerarquía, que no se logra la victoria por la casualidad, caso fortuito o como quieran decirlo, este resultado es resultado del buen funcionamiento colectivo (salvo el caso Guille Franco, que sigo sin entender), que quienes entraron de cambio cumplieron cabalmente con lo que se esperaba de ellos, que el chicharito entro enchufado y demostró que debe ser tomado en cuenta para iniciar los partidos.
Una vez dicho esto, debo decir que me encuentro sorprendido, es ilógica la forma en que nuestro país se toma la victoria, ahora resulta que ya nos sentimos candidatos, sentimos que todo es posible (quizá una vez publicado esto me tachen de malinchista) pero en la historia reciente hay que recordar que nos pasa cuando inflamos las cosas, terminamos llorando y desilusionados, resulta ser ¡peor! por lo cual quiero hacer un exhorto para guardar en las debidas proporciones, obvio disfrutar de ella pero sin aspavientos, sin pensar que porque se le ganó a Francia se le puede ganar a cualquiera, hay que ser prudentes, como lo dijeron los propios jugadores: "no sea ganado nada, desfrutar la victoria y mañana pensar en Uruguay". Hay que dejar de pensar en los posibles cruces que si nos puede tocar Argentina o Corea del sur, primero hay que conseguir el boleto para octavos y después pensar en el rival que sigue, como se dice ir pasito a pasito.
Para concluir con esta corta entrada, debo decirles que en lo personal espero que se le gane a Uruguay y si tenemos que encontrarnos con Argentina que sea en otra instancia y así disfrutar mas la eliminación de los pamperos (quienes parece juegan solos, porque no tienen DT)
2 comentarios:
Soy (y siempre he sido, tú lo sabes) un partidario de guardar todo en su justa proporción. Creo que tienes la razón, sí. Pero creo también que lo de ayer no era para menos. Es cierto, hemos sido cursis, exagerados, rimbombantes. Nos hemos crecido, sí. Pero a final de cuentas, ¿eso qué? Le ganamos a La France! Fue un partido increíble, hermoso, ganado con fútbol y muchos huevos. Y si seguimos así, yo no veo rival a quien no podamos plantarle cara (excepto quizá, Alemania, que, con todo y todo, perdió hoy mismo, o USA, que igual perdió). Así que lo único que puedo decir es ánimo, hay que seguir por el mismo rumbo.
espero de todo corazón que el equipo mexicano siga jugando como lo hizo contra Francia y quizá así se pueda hacer historia.
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